¡Pueblo, Mi Querido Pueblo!
Por el inefable amor a nuestro pueblo, en ocasiones le había pedido a Dios que nos diera las razones para, en esta fecha, aún fuera doblegado nuestro orgullo, escribir un manifiesto en que declaráramos al “Señor Alcalde” del Municipio de Villa Isabela como digno hijo adoptivo de dicho pueblo.
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| Eladia Mora Brito |
Más hoy, conmovida, al ver las sólidas lágrimas que como granizos de lluvia ácida laceran la conciencia de nuestros compueblanos, retornan a la memoria las palabras de un fragmento del discurso que pronunciáramos el día 20 del mes de marzo del 2010, en el lanzamiento de la candidatura del Dr. López para la alcaidía del Municipio. Dijimos: “Somos gente buena y hospitalaria, podemos dar de comer y hasta prestar una casa a un forastero; pero que la casa municipal no podíamos prestársela a nadie”. A algunos no les gustaron estas expresiones. Otros por resentimientos absurdos se hicieron de oídos sordos. En esos momentos quisimos demostrar que antes de ser políticos somos Villa isabelinos y en el momento de decidir debemos escoger por lo nuestro y los nuestros.
No obstante esa advertencia, el 16 del mayo del 2010, el pueblo escogió con ligera mayoría como representante legal del gobierno Municipal al “Señor Alcalde”, un ciudadano que nunca ha residido en este pueblo. Nunca habrá de olvidarse, como se rebozaron de júbilo las copas de la ignorancia. Mientras que la constitución, en el artículo 201, párrafo III, establece:”Las personas naturalizadas con más de cinco años residiendo en una jurisdicción podrán desempeñar dichos cargos, (alcalde, regidores, etc) en las condiciones que prescriba la Ley”...
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